Los envases de plástico atraviesan un momento difícil en la economía actual. Con los gobiernos y el mercado de consumo exigiendo cada vez más un mundo más ecológico, el cerco se está cerrando.

Las principales autoridades de la ONU se están organizando para llegar a un acuerdo mundial para racionalizar la producción de envases de plástico de un solo uso. Con ello, gigantes del consumo como Coca-Cola, Nestlé y Pepsi. Co tendrían que replantearse por completo su cadena de suministro para cumplir los nuevos requisitos.

La presión de los consumidores no hace más que aumentar debido a las catástrofes naturales que estamos sufriendo. Por lo tanto, la contaminación de los ríos y las inundaciones urbanas son peligros cada vez mayores. 3 de cada 4 personas están a favor de acabar con el uso del plástico de un solo uso.

El comité negociador responsable en la ONU tiene previsto celebrar 5 reuniones en los próximos dos años para llegar a un acuerdo. Se calcula que en 2050 la producción de plástico representará el 20% del consumo mundial de petróleo.

Envases de plástico y estrategias de futuro

Hay varias formas de establecer una transformación en los envases y cada país debe encontrar la que mejor se adapte a su realidad. Por ejemplo, en la Unión Europea, el enfoque ha sido más directo con las empresas, exigiendo envases ecosostenibles. Por otro lado, Japón está estableciendo gradualmente objetivos de reciclaje.

Centrarse en el reciclaje es más barato para las grandes empresas productoras de plástico. Sin embargo, es más agresivo para la naturaleza que un rediseño de los envases. Al fin y al cabo, sólo el 10% de los envases de plástico se reciclan, incluso con incentivos de empresas y gobiernos.

Hay muchos intereses en torno a esta cuestión, desde la exportación de petróleo hasta la preocupación por el medio ambiente.Pero los hechos apuntan a que la gestión de los residuos y el reciclaje, sin cambios estructurales, solo está resultando ineficaz con el tiempo.